Ya no se
esperan a la negociación de un convenio para vender los intereses de los
trabajadores, el sindicato vertical de la ONCE declina poner en práctica las
normas, incluso europeas, y vende un mal acuerdo como una victoria, vamos lo de
siempre.
El pasado 19 de febrero, se perpetró un nuevo desacato
contra los intereses de los trabajadores de la ONCE por parte del sindicato
UTO-UGT.
Ahora con la escusa de poner
en riesgo la estabilidad de la Institución, la posibilidad de tener que
renunciar a las pocos derechos consolidados que nos quedan, (antigüedad, cargas
familiares, complementos por IT), o incluso metiendo más miedo, poniendo la
situación actual como escusa, y planteando reajustes de salario, de comisiones
por venta, eliminación de tramos de comisiones o reducción de plantilla de
trabajadoras/es, ¡vamos lo que vienen diciendo, y haciendo, desde el 8º
Convenio colectivo!, que hemos perdido la mayor parte de los derechos
consolidados, y con el mismo argumento de la estabilidad Institucional y
laboral, nos han venido reduciendo nuestros salarios, nos han subido los mínimos por venta, se ha reducido la plantilla de vendedores y no
vendedores, en fin, que todo lo que han predicado como argumento de estabilidad
se lo han cargado en estos años. Por lo que si estamos en un momento delicado,
según ellos, nos podrían explicar de qué han servido estos esfuerzos para estar
en el mismo sitio que hace 18 años?.
Ahora y como nos tienen
acostumbrados, en vez de defender los derechos de los trabajadores y obligar a
la Dirección de la ONCE al cumplimiento de la Legislación Europea, le dan la
vuelta a la tortilla y nos dicen que, para salvaguardar nuestro futuro,
permiten, cual agencia tributaria, se retenga a los vendedores mensualmente un
10% de las comisiones, para devolverlas en los periodos vacacionales.