CSIF ONCE

REQUIEM POR UN SUEÑO

¿Cómo los señores de UTO-UGT pueden tener tan poca vergüenza, congratulándose públicamente de haber contribuido -con su apoyo incondicional- al desguace de la ONCE a cambio de una limosna, de un tanto por ciento, de unas condiciones impuestas por empresas ajenas a la discapacidad?

¿Cómo puede haber un solo trabajador que aún les de crédito, después de haber tachado de alarmista, mentiroso, desestabilizador, manipulador, de estar en contra de la ONCE a nuestro sindicato, CSIF cuando lo único que hemos hecho es informar de los pasos y acuerdos tomados para la venta del cupón tradicional por los CFC?.

El tiempo es ese juez inexorable que a cada uno va poniendo en su sitio. Muchos de los que ahora pertenecemos a esta institución nos hemos sentido afortunados por el hecho de tener un trabajo bien remunerado, con vacaciones, con pagas extras, con seguridad social, etc…, ignorando que si gozamos de todo esto ha sido gracias al sueño que un día tuvieron nuestros antecesores y que hicieron de la venta del cupón el símbolo de un trabajo digno. Eso no fue casualidad ni flor de un día. Fue el sueño de unas pocas personas ciegas que les llevo a rebelarse contra la sociedad, a reivindicar justicia, porque es de justicia que la sociedad apoye al más débil, al minusválido, al anciano, al necesitado. Ese sueño de que el discapacitado dejará de estar predestinado a la marginalidad, a la mendicidad, queriendo cambiar el rumbo de su destino por un trabajo digno.

Y crearon el cupón y más tarde nuestra ONCE, una Institución sin ánimo de lucro, y a ellos nos unimos muchos más, y ya nunca al discapacitado se le asoció con la limosna compasiva.

Hoy ese sueño se ha roto, le han dado una puñalada de muerte al prestigio del trabajador discapacitado, unos dirigentes enredados en oscuras alianzas ajenas a la discapacidad, cuyos fines son estrictamente mercantiles y con el siempre servil beneplácito del pseudo sindicato UTO-UGT, han vendido ese sueño al mejor postor. No importa el resultado de esa decisión: en el mejor de los casos si los CFC son un rotundo éxito se demostrará que los discapacitados por si solos no hemos sido capaces de sacar hacia delante una obra completamente nuestra y estaremos en manos de los gestores de esos CFC, nuestros salvadores, y volveremos a recoger las migajas que compasivamente nos quiera dar toda esa maquinaria con más de cien mil puntos de ventas, (sin contar con los familiares de éstos que puedan ejercer la venta sin control de nuestros productos haciéndonos la competencia), que se implantaran en toda España que serán nuestros rivales gestionados por personas sin discapacidad, mejor titulados, mucho más agresivos y más acostumbrados a que lo económico prevalezca sobre lo ético, sobre lo solidario.

Con el sabor del trozo de pastel que nosotros le hemos dado a esos accionistas, será como poner a la mascota del hogar frente al perro de pelea que huele a sangre de un rival mucho más débil y al que estará dispuesto a rematar a base de dentelladas.

Aquellos dirigentes capaces de enfrentarse a cualquier Gobierno de turno que osara manipularlo o a cualquier otra fuerza que quisiera adueñarse de su cupón, de su Institución, hasta hacerles empuñar sus bastones para defender sus derechos a bastonazos y que logro todo esto que hoy gozamos, se han truncado en unos dirigentes pasivos, sin miras en el futuro de los que vendrán detrás, contemplativos de sus ombligos, practicando como única religión el servilismo al superior para no contrariarle: los dirigentes y su incondicional y siempre leal marioneta UTO-UGT con el fin de no perder las prebendas personales logradas han sido capaces de traicionar lo más sagrado (no importa lo grandilocuente que suene porque es así) de esta Institución, su símbolo y emblema: EL CUPÓN.

Es mentira que el cupón se da a los CFC por estrategia, por el posicionamiento de otros operadores en el mercado del juego, son razones puramente mercantiles en beneficio de no se sabe quién, nosotros siempre hemos competido con los demás operadores de juego pasivo sin ningún problema, y por supuesto, no puede ser la solución crear un nuevo operador con nuestros propios productos y además dotado de muchísimos mas medios y productos que nosotros (gasolina, bebida, tabaco, prensa, etc.) y entre otras muchas cosas con promociones de regalos y viajes que nosotros no podemos ofrecer a nuestros clientes como está pasando con las promociones que hacen por la compra en sus establecimientos del rasca.

No se nos puede etiquetar como una red deficiente de vendedores, incapaces de ser competitivos en el mercado del juego sin posibilidad de generar suculentos beneficios, mientras se premia a nuestros dirigentes (esos cuyo único requisito indispensable para ejercer su cargo es el de ser titulado y poseedor del carnet de UP y/o de UTO-UGT) con suculentos sueldos de millones de euros y con jubilaciones escandalosas por los servicios prestados. Pero resulta que la culpa de todo es de los 19.500 vendedores que no hacemos bien nuestro trabajo y hay que ir poco a poco “desvinculando la venta de estos inútiles”, hay que desmantelar los puntos de venta por el “¡sálvese quien pueda! “

…Y argumentaran cualquier cosa para callar bocas, para que la gente no piense por si sola, para que nadie se planteé cual es el futuro de la red de ventas, para que nadie empiece a dilucidar cuál va a ser el siguiente paso.

Unos pocos hablan de movilizarnos, de levantarnos en protestas. Sabéis que por muchísimas razones eso no va a ocurrir y si llegará a ocurrir seriamos los mismos de siempre dispuestos a que nos rompan la cara por los demás, mientras la gran mayoría sigue agazapada y buscando argumentos para excusarse de sus miedos. Pero si de verdad pensáis que UTO nos ha vendido al mejor postor siendo el cómplice con su firma de los acuerdos adoptados y con su servil apoyo incondicional para perpetrar este cúmulo de decisiones nefastas para el vendedor, podéis hacer algo muy simple y sencillo sin que tengáis que asumir ningún riesgo ni temor a las consecuencias personales: daros de baja de UTO. Estamos seguro de que será la única forma que les haga recapacitar y oír a los trabajadores.

Yo no quiero que me den un tanto por ciento del trabajo de otros, yo no quiero limosnas compasivas. no quiero un día llegar a sentirme tutelado por U.T.E., GTECH o cualquiera de esas empresas con sus poderosos accionistas detrás y que nos permitan a los pobrecitos discapacitados comer de sus migajas.

 

¡¡¡NO SIGÁIS SIENDO CÓMPLICES DE LA DESMANTELACIÓN DE LA RED DE VENTAS TRADICIONAL DE VENDEDORES DISCAPACITADOS DE LA ONCE!!! ¡¡¡AUN ESTAMOS A TIEMPO DE EVITAR QUE NUESTRA RED DE VENTAS SE TRASVASE, DEJÁNDONOS EN MANOS DE UNA GESTIÓN QUE NADA TIENE QUE VER CON LA DISCAPACIDAD!!!