martes, 25 de noviembre de 2014






25N - DÍA INTERNACIONAL
CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO

“Si pudieras ver el daño que hacen tus palabras…”



“Las grandes cosas en la vida comienzan con detalles:
minúsculos en apariencia, pero profundos en consecuencias”.


Cuando pensamos en la Violencia de género, automáticamente acude a nuestra mente una misma imagen: golpes y maltrato físico.

Al hacerlo olvidamos otro tipo de violencia, mucho más silenciosa pero igual de real: la Violencia verbal.

Este tipo de violencia es más difícil de percibir, no sólo porque suele cometerse en privado, sino porque las heridas que provoca son invisibles. Sin embargo, las cicatrices que deja en la víctima son muy reales, dolorosas y pueden durar años.

Es como una paliza que no deja evidencias, en la que la víctima es golpeada con burlas, insultos, gritos, amenazas críticas permanentes que socavan su seguridad y autoestima.

No olvidemos que la palabra tiene un poderoso efecto en la conducta, transformando las emociones de quien la recibe.

Y no sólo nos referimos a lo que se dice, sino también a “cómo” “con qué intención” se dice. El maltrato verbal puede ser directo o muy sutil: cualquier desprecio, insulto o amenaza puede hacerse a gritos o con la mayor de las sonrisas.

Así, una casa en la que se abusa verbalmente de la pareja o de los hijos, es un ambiente en el que la humillación continua destruye la autoestima y afecta seriamente la dignidad de todos sus miembros. Diversos estudios científicos revelan que las víctimas de maltrato verbal comienzan a interiorizar la crítica y terminan por aprobar la violencia, considerándola un castigo por sus faltas.

En el caso de los niños es una cuestión aún más grave, ya que crecen con una imagen de sí mismos absolutamente deteriorada, algo que con el tiempo puede manifestarse como agresividad o inhibición: hacer lo que les hicieron a ellos o someterse como víctimas del maltrato de otro.

Además, al producirse dentro del ámbito privado, oculto tras la puerta de cada hogar, la Violencia verbal es también el tipo de maltrato menos denunciado judicialmentesiendo incluso admitido socialmente en ciertas ocasiones.

La clave para vencer esta forma de violencia está en reconocer el abuso verbal por lo que es, y comenzar a tomar pasos deliberados para detenerlo: 
  • NO toleres ninguna forma de maltrato verbal.
  • NO te sientas culpable.
  • NO defiendas ni justifiques a tu verdugo. 
La violencia suele iniciar con "sutiles" abusos verbales y emocionales y poco a poco puede ir incrementándose sin que te des cuenta, abarcando todos los tipos de violencia... hasta la más extrema.

NO dejes que sus palabras te sigan haciendo daño...